Scones y… ¡¡100 seguidores!!

Ya son más de 100 amigos los que me siguen en este blog, muchísimas gracias a todos. Desde el primero al último, gracias por estar ahí, por vuestros comentarios, por vuestros ánimos, gracias de verdad. Me hace una ilusión tremenda.

Pero bueno, como hay que seguir con las recetillas ahí va la de mis scones! La inspiración me la disteis entre todas con vuestros apetecibles scones, sobre todo Olivia. Y la receta es, otra vez, del libro que me regaló mi hermana. En el libro los presentaba como “bollitos ligeros” y la verdad es que tiene toda la razón.

Ingredientes (yo hice la mitad):

-          350 gr. de harina con levadura.

-          100 gr. de azúcar.

-          100 gr. de mantequilla.

-          175 gr. de buttermilk o suero de leche.

-          Queso y membrillo para acompañar.

Elaboración:

1. Preparamos la buttermilk, echándole un chorrito de limón a la leche. Sin tocar la mezcla dejamos reposar 10 min.

2. Precalentamos el horno a 160º arriba y abajo ventilador.

3. Ponemos todos los ingredientes en un bol, la mantequilla en pequeños trocitos, y mezclamos todo con las manos. No amasamos demasiado.

4. Cuando tengamos más o menos una bolita, la extendemos con un rodillo en la mesa. Quizás tengáis que poner harina a la mesa y al rodillo para que no se os pegue mucho.

5. Cortamos con un vaso o corta pastas los scones, del tamaño que os venga bien, yo los hice pequeñitos.

6. Los colocamos en la bandeja del horno con papel vegetal y horneamos unos 12 minutos, o hasta que doren un poco, el tiempo dependerá del tamaño de los scones. Para hornear, la función será la misma del precalentado y la altura de la bandeja la segunda empezando por abajo.

Algunos se deforman un poquito, pero eso es porque suben bastante. La mayoría quedaron muy bonitos y todos súper buenos. Nunca los había probado y la verdad es que me encantaron, son blanditos por dentro y con una fina capa crujiente por fuera. Rellenos de queso y membrillo son una delicia.

¿Te apetecen?